El embarazo viene acompañado de múltiples malestares que varían desde náuseas, problemas con la vejiga y hemorragias nasales. Pero existe un síntoma más común llamada falso parto.
Falsas alarmas
Generalmente la espera del nuevo bebé causa en la madre y la pareja un sentimiento de incertidumbre por saber cómo será su parto, pero los futuros padres también deben de estar preparados para afrontar las contracciones uterinas que se presentan durante las últimas semanas del embarazo conocidas comúnmente como falsa labor pero que en realidad tiene un nombre propio, contracciones Braxton Hicks, ya que fueron descubiertas gracias al médigo inglés, John Braxton Hicks en 1872.
Estas contracciones tienen las características de abarcar todo el útero, comenzando en la parte superior y ampliándose progresivamente hacia abajo, no son dolorosas y sólo se percibe que el abdomen se endurece produciendo una sensación de tensión abdominal y dura aproximadamente entre 30 y 60 segundos. Estas contracciones falsas pertenecen a un ejercicio del músculo uterino para prepararse para el día del parto.
